Ayer no cené en casa. Cuando llegué, la noté más relajada. Me parece que necesita un descanso. La pobre está todo el día aguantándome. Hoy tampoco iré a cenar: seguro que lo agradece.
A mí me ha pasado lo contrario. Que hace tanto que no estaba que ayer estuve más de cinco horas y esta mañana, al despertarme, parece que estaba más armónica. ¿Pueden echar de menos las casas?
2 Comments:
A mí me ha pasado lo contrario. Que hace tanto que no estaba que ayer estuve más de cinco horas y esta mañana, al despertarme, parece que estaba más armónica. ¿Pueden echar de menos las casas?
yo no quiero maricones en mi casa...
P
Publicar un comentario
<< Home