Pura armonía
El primer amor de M. fue un hombre casado. Haber empezado de ese modo su biografía sentimental le ha impedido padecer alguna situación de celos. ¡Toma riqueza de personaje!
Dice Julio, que Nawja es lo que hizo Bjork hace cinco años. Digo yo que es maravilloso.
Digo yo que la discreción ya no está en tendencia. No es buena. No es ni siquiera un valor. ¡Viva el bocacismo!
Dice mi jefa que soy un ingenuo. Lo sé pero no me importa. De hecho es lo que me salva.
Dice X, cuando le saco el tema de la precocidad en la eyaculación masculina que bah! que esas cosas dejan de importarte cuando te casas. ¡Toma-toma-toma!
Dice F que le ha dicho el médico que puede hacer vida normal. Se ríe y sé pregunta en qué consiste eso. Yo también me río pero sí sé en que consiste eso: en vivir menos pero vivir mejor.
Dice Z que no se aprende de los errores; se aprende de los aciertos. ¡toma tópico descojonado! Suscribo. Dice también que Devendra Banhart es demasiado...no sé... demasiado folk. Y que respecto a los trastornos mentales cierta narrativa lo coloniza todo. Yo lo único que hice fue bajar la montaña en tercera para no soltarte la mano.
El otro día vi un trailer con tractorcitos en lugar de coches. Luego vi un cartel que decía Rueda 12. km. E imaginé los tractorcitos trabajando entre vides; pura armonía.
posted by anTón at 4:41 p. m.
10 Comments:
Mira que los ratitos del cigarro y el café dan para alguna conversación, ¿pero cuantos te fumas tu al día?
Bravo, chaval! Has entrado muy puro en esta nueva fase no diaria. Un placer.
dice mi colega que los celos no existen, que no son más que envidia al ver que el otro siguen interesando a alguien más que a ti.
Me encanta lo de bajar la montaña en tercera... y de la mano
La ingenuidad es como la memoria de los peces: Olvidar lo aprendido es condenarte a repetirlo una y otra vez. Repetir errores y los aciertos. La vida normal no es más que una cadena interminable de repeticiones de errores y aciertos. Vida de ingenuos. No creo que nadie se libre de ese tipo de vida.
Los celos son una pasión y como tal pura vida. La discreción es necesaria, más aún, imprescindible. La ingenuidad una ternura. La eyaculación precoz dejará de importar cuando te casas sólo si te encierras en el matrimonio. La normalidad es como el centro en política: hace tiempo que no existe. Y se aprende de todo; de los errores y de los aciertos tanto propios como ajenos
La vida a veces me maravilla. Hay aciertos que emocionan, ¿también/sobretodo? a los ingenuos. Nunca soñé poder decir que alguien bajaría una montaña en tercera por mí. Creo que cosas como estas son las que hacen que no haya lugar para los celos. Todo lo demás da igual, todo.
¿La precocidad no es una subjetividad que depende de la narrativa con que se la mire?
¿El sabor de los oricios forma parte de vivir más o de vivir mejor? ¿Cómo pudo pitar ese tío en un sitio así?
muac
yo me asomo a Madrid y veo cabezas tractoras y gruas entre barrancos. Nada que ver con tu imagen
yo me asomo a Madrid y veo cabezas tractoras y gruas entre barrancos. Nada que ver con tu imagen
Dile a Z que no se aprende ni de los errores ni de los aciertos, simplemente no se aprende...
Decirle a X que tal vez por eso hay un 75% de matrimonios que acaban en divorcio (lo han dicho hoy en la radio) y que son precisamente las mujeres las que hacen las maletas y se largan dejandole al eyaculador con la casa y los hijos. Decirle a principe que tiene mas razón que un santo. No podemos evitar caer una y otra vez en los mismos errores, si no no estarian ahi el amor ni la amistad y puestoa a comentarlo todo, los celos son inevitables si quieres a alguien de verdad, puede que sea por egoismo, pero quien no desea que la persona a la que amas te quiera solo a ti, mucho y para toda la vida. Claro esta que el tema cambia cuando te desamoras de esa persona y te enamoras de otra.
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