miércoles, mayo 26, 2010

Ocios


A la entrada, el publico en potencia presenta una magnífica educación corporal. Domina el negro y los escotes de verano. A la salida de Peeping Tom un grupo de chicas decide el bar. Una de ellas -pesada con bici (y seguramente con perro)- dinamita los planes del grupo en defensa de su vehículo norteuropeo.

En la cola de Cineshock hay un público joven y gay con latas de cerveza de chino. En el interior se puede fumar y beber; un chica presenta la película de la siguiente manera. El argumento va de lo que es el sueño de los heterosexuales: construir a su novia con retales de puta. Lo dice con voz tenue y humor interior.

La nieta de Chaplin, en un espectáculo bello y recomendable vuelve a las entreguerras con humor blanco y suave . A la salida, María, señala problemas de ejecución que yo no advierto.

Termino Expiación cuya protagonista escribe: ¿Cómo hacer justicia a los cambios que por fin la habían convertido en una auténtica escritora y al caótico enjambre de impresiones, y al asco, y la fascinación que la embargaban?

Jero ya tiene web. Es coqueta y molona.