martes, octubre 09, 2012

¡Vln!

 
Debajo de casa había un ultramarinos: latas de atún, vino, arroz, y eso. Cuando abrieron El corte Inglés, solo por agradar, le dije a la cajera, : "os van a fastidiar estos ¿no?" Ella, con la suficiencia que da la ignorancia y la estupidez me dijo: "a mí me la suda: por mí que hagan lo que quieran". Andaba la chica hoy por el barrio, la que nunca me dio una sonrisa, con la cara triste y la cabeza baja. Ha cerrado el ultramarinos y ella tenía cita en un sindicato. Vale. La próxima vez sé un poco más maja con los que te habríamos apreciado. 
No hay distancia en el universo mayor, que la que separa a Balzac de Angels Barceló, entre la profundidad y lo superficial más manresano. Entre la calidad y el provinicanismo. Cuánto daño estéril, querida, generas por imaginar que tu coño es más grande que el Stromboli.
Se ha casado J. Estoy con él. Ahora mismo.