jueves, mayo 23, 2013

Un poco de pasta basta, giooooooor


Ya sabíamos que para pensar sobre una mazana que cae hay que tener un jardín en Chelsea y que lo único relevante del XX ha sido, fue, la inadaptación de la vanguardia, suerte de epílogo romanticista. Ahora que sabemos que jesús de nazareth no exixtió o, al menos, no repercutió sobre su tiempo, que Colón no fue el primero en llegar y que Shakespeare probablemente no escribió ni una sola palabra de las que se le atribuye podemos entender el momento de zozobra que vivimos, de mentira perpetua, por no hablar de que los salmones hace décadas que no son rosados, sino coloreados como un película de John Ford. Pero la historia está muy bien para saber que la revolución francesa fue el final y no el principio, que Lisboa tuvo que ser ser destruida para renacer, como San Francisco o que la enciclopedia de Diderot quitó a la iglesia el monopolio del saber. En fin, lugares comunes de un mundo que está en pañales y todavía por hacer ajeno a la historia, desechando el nudo hecho, convirtiendo el desenlace en una máquina. Con un poco de historia, o de Gior, basta.

Hoy tengo tabasco en el alma.