viernes, octubre 31, 2008

el 7

El siete no es un autobús cualquiera. Porque el 7 no te transporta, te mece desde casa al trabajo cada mañana, como una cuna colectiva cubierta y espaciosa. Ahí estamos los de siempre, la creativa que va hasta una agencia de Manoteras con su i pod, su revista de diseño gráfico, que quiere ser algo grunge pero se queda en mona con voz de pija y mayor de lo que parece. A veces se sienta con ella la que parece secretaria de dirección, habladora y maja, que cuenta cosas de su novio. Ni la creativa mona ni el creativo que llega dos paradas más tarde respetan a la secretaria de dirección y es una pena porque es una buena persona. Luego esta la que tiene la piel suave y los ojos azules, guapa sin sacarse partido. Creo que trabaja en inmobiliaria aunque le pega más un despacho de abogados. Los viernes se compra un tortel y se lo lleva a su casa y ahí lo disfruta junto con el último best seller. Está pensando apuntarse a match.com. Bajamos en la misma parada. Hay tambien, en esta cuna gigante, un solitario que tira a informático que lee prensa gratuita que también se sienta en la última fila, como yo, donde nos ponenos los malotes y no nos amenaza la presencia de alguien a quien cederle el sitio. Por último, y no por ello menos importante, la andina que lleva a un niño al colegio. Nunca ha tenido que reñirle y parece que se llevan bien y se obedecen y respetan.
Cuando estoy llegando, en la curva anterior a mi parada el bus me balancea por última vez. Es su manera de decirme: que tengas un buen día

Orgánico y anecdótico

Este mes he incorporado dos palabras a mi vocabulario: órgánico, muy operativo cuando estás frente a un montaje de vídeo y quieres quejarte de algo y, anecdótico, muy útil en ambientes de arte contemporáneo, donde conviene tener también preparada, por si las moscas, intervención. Ahora soy dos palabras mejor persona.

No es nada
anecdótico, por ejemplo, que un artista contemporáneo pinte con un Boli bic azul cristal una escena de caza con sus perros y venados, de dimensión considerable, típicamente inglesa y revisada por el zafio encanto de la burguesía española de provincias. Se llama Miguel Ángel Rebollo

Ayer, entre migas, caldos y cervezas, se volvió a tratar el tema tan espinoso tema de
currar y trabajar. Frente a la tesis (Marcos) de que quien gana más de 3000 euros brutos, trabaja y, el que gana menos, curra, ayer –sin éxito- llegué un poco más lejos. Creo que curra que el gana menos que su padre y lo odia, y el que gana más y también le odia, trabaja. Si no se odia al padre, ni se curra ni se trabaja. Esta tesis, como digo, no tuvo éxito ni de crítica ni de público.

jueves, octubre 30, 2008

Un tío agradecido, claro que sí, y majo

Xoel habla con emoción de una de sus últimas aventuras, la grabación de un documental sobre el Camino de Santiago para la cadena National Geographic. "Ha sido muy enriquecedor, pero durísimo: estos tíos del National se levantan a las ocho de la mañana y terminan de trabajar a las once de la noche". El viaje arranca en Holanda, pasa por Bélgica, Francia y finalmente llega a España. "Lo que más me ha gustado ha sido encontrarme con músicos por el camino y tocar. Tuve un encuentro con una agrupación medieval y acabamos tocando Smoke on the water, de Deep Purple", cuenta. Los capítulos, seis de media hora, se emitirán en febrero de 2009.
EL PAÍS 30/10/2008

El Cairo, tu cairo


Madrid, Lisboa, Buenos Aires, Asunción, La Paz,
Cuzco, Río de Janeiro, Santiago de Chile, Montevideo,
Roma, La Habana, París, Tánger,
San Francisco, Tijuana, New York, Rotterdam, Bruselas

Invierno

He puesto una bufanda
a mi ventana
para no enfriarnos;
y al reloj,
una cuerda de menos.
(para ganar tiempo)
A la nariz, una mordaza
y al amor,
un cabo.
Mientras una soga estrangula
el plano secuencia
de tu vida de antes.

lunes, octubre 20, 2008

La couldina adormece, a la tercera, droga


http://www.dialogica.com.ar/rosarioalternativo/lluvia.jpg
El teléfono suena sólo cuando él quiere, como la flauta, como el amor, como el piano de Glen Gould, que no puede hacer mal a nadie; tampoco Gladiator aunque la sensación que te deja uno y otro es muy diferente. No sé quien soy pero no tolero que me deformen. A Grombowitz lo he conocido hoy y sólo con el viento liviano de Vila Matas que enseña mucho: a Grombowitz, por ejemplo, que habla de la guerra entre la inmadurez y la inmadurez insoportable, es decir, habla de mí.

Gil de Biedma no quería hacerse viejo; por eso vivió así. Lógico. (Envejecer morir/único argumento de la obra).

-No te olvides de poner mantequilla por las esquinas si quieres un sándwich mixto que sea relevante, soledad.
-De todo lo relevante, nada lo es tanto, como la lluvia.

domingo, octubre 19, 2008

Me bajo del péndulo



Un día vas y pones a Bob Dylan sin darte casi ni cuenta, poco después de haberte deshecho del comodín de disponibilidad y de despertarte de una minisiesta con un sms que dice capullo; nunca me coges el teléfono. Ella es la única que tiene razón pero soy incapaz de hacer daño a quien no se lo merece. No tiene razón, en cambio, el del ataque de celos cuando me fui de findesemana con su novia y ahora me reclama un no-sé-qué. Tampoco el que dice que estoy desaparecido, cuando se marchó sin dejar razón y no asume las consecuencias. Tiene razón la vida al devolverme al compañero de tenis, al que es como yo y lo necesito estando –vivo como está él. Se equivoca el me dijo que era inteligente porque no lo soy y agradezco al que me respeta en el trabajo y en el desastre, en mis dos vertientes respectivas, así como me estremecen los que me abren las puertas del domingo y siento cierta desidia al que me admira sólo porque le hago un poco de caso. Me duele el que me desaparece porque no le cuadro del todo; pero lo entiendo y le entiendo perfectamente. No olvido a los que se mueren.


Se me está escapando el tiempo y voy a cerrar con llave y candao la cita entresemanera con conocido/a cargada de esfuerzo y de amor, que, al final de los años, me está cuarteando. Llevo en la cabeza y en el corazón un facebook mental y analógico mucho antes de que lo inventasen en Silicon Valley que, no por casualidad, está muy cerca de la cárcel de Alcatraz.

viernes, octubre 17, 2008

Buenos días

http://www.parapente.net/res/gere/buenos%20dias.jpg

lunes, octubre 13, 2008

Kjell Askildsen

http://www.mauroaltair.eu/imagenes/espigas%20contacto.jpg

...porque en la llanura no crecía otra cosa que paja, espigas, pensamientos, y una pequeña flor sin nombre. Yo no sabía entonces lo que significaba una llanura de ese tipo, que puedes llevártela dentro y tumbarte sobre ella en un piso de una gran ciudad o en una oficina un día de invierno; yo no estaba ahí tumbado disfrutando del momento, sólo estaba tumbado, a medio camino entre el mar y la ciudad, con un montón de cabezas de espigas a treinta centímetros de la cara, con pantalón corto y camisa de cuadros.

miércoles, octubre 08, 2008

Celebración

http://www.streetsblog.org/wp-content/uploads/2007/07_09/bikeracks.jpg
Estoy de celebración.
Lo he hecho con un argumento, que en verdad soy yo
con correcciones al guión,
que sólo corrigen al guionista.
Con nuevo director general, que sólo es una persona,
con un modelo de Marc Jacobs
con un viaje planeado y contado más que hecho.
(fotografiado)
Con un comentario desidioso sobre el trabajo.
con Berlín, Willemsbourg y Barcelona
con drogas de diseño
y un coqueteo de casado,

Entre tantas mentiras celebro que la muerte
ha dejado de rondarme.
Mañana lo haré de verdad,
con las dos verdades: sashimi y jamón,
con el el pantalón de tenis de Federer,
con un par de amigos y otro de huevos fritos,
con un piano de Satie.
Con unos gramos de franqueza de entreguerras.
Mañana, o cuando sea,
quiero celebrar
una cuantas verdades

lunes, octubre 06, 2008

Fe de vida, de José Hierro

Sé que el invierno está aquí,
detrás de esa puerta. Sé
que si ahora saliese fuera
lo hallaría todo muerto,
luchando por renacer.
Sé que si busco una rama
no la encontraré.
Sé que si busco una mano
que me salve del olvido
no la encontraré
Sé que si busco al que fui
no lo encontraré.
Pero estoy aquí. Me muevo,
vivo. Me llamo José
Hierro. Alegría. (Alegría
que está caída a mis pies.)
Nada en orden. Todo roto,
a punto de ya no ser.
Pero toco la alegría,
porque aunque todo esté muerto
yo aún estoy vivo y lo sé.

(Alegría, 1947)

sábado, octubre 04, 2008

La lista

1 cartón de Chester
3 kilos de naranja "Solita"
1/2 kilo de sitaki
Tomate maduro para gazpacho y dos pepinos
1 pantalón para yoga en H&M
1 piña
1 pimiento rojo (para unos contramuslos que tengo congelados que voy a hacer al chilindrón)
Chim pom

4 de octubre

No se puede mostrar la imagen “http://www.monotype.es/Imagenes/MUSEO/BALTHUS%203.jpg” porque contiene errores.
El hombre está configurado para viajar a 6 km por hora, -dijo Ferdinald, y desde hace un siglo lo hace a 120 y a más cuando se sube a un avión. Me acuerdo de Ferdinnald en el Thyssen, donde pasas del barroco y los bodegones a las rejas de Mondrian en sólo cinco sets. Aun así me sujeto a mis pies para ir despacio y paso de largo de los rusos geométricos, tristes y grises y me dejo impresionar un rato antes de pensar ¿Y si Rothko fuera mentira? No lo es. Y me paro en Balthus y recuerdo que compré un libro suyo hace ya un año en Bilbao que no he abierto. Esto, me lo concedo. ¡Y de repente! rechinan los tacones de bota alta, pura sensualidad, de burguesa de capital, de Almagro quizá, y me recuerdan que los grandes museos son como los hamannes donde ella -como yo- se limpia y se frota y se deshace de las capas de la piel estropeada por lo cotidiano de la neurosis y de la represión. Me olvido de Balthus y de Feinninger y en mis ojos nadan, junto a sus tetas, un grupo de escandinavas rubias como las mechas y me dejo llevar por el personal de seguridad mucho más femenino de lo que ellas quisieran. Y sé que esta mañana me he curado del apaleamiento que me da la vida, cuando ella quiere, y del que me doy yo, hasta cuando no quiero.